Echo de menos reírme de la vida y creer que la felicidad lo da todo, echo de menos el olor de una sonrisa y lo caro que se ha vuelto dar la espalda al dinero.
He comprendido lo que es la amistad y lo que una familia significa, pero aún no entiendo eso de que hay amores que matan, pues este nunca muere.
He visto llorar de felicidad y he sonreído cuando no quedaba nada en el mundo.
He sido mala brindando por aquellos que no creyeron en mi....
Saqué alas para volar cuando no quedaba viento en el que planear..
Echo de menos eso que de niña una siempre cree, todo es posible, ahora, sin embargo, nadie ve más allá de lo imposible.
El límite está donde tu te lo pongas, supongo que por eso me llaman niña, porque para mi lo imposible no existe.